Excesos de los Cargadores de Jesús de los Milagros Del Templo de San José Zona 1 Guatemala.

Empiezo esta difícil tarea, sin embargo necesaria de denunciar a través de estas líneas algo que ha venido soportando la familia de mi esposa en su vecindario hace ya muchos años; que este año si se volvió literalmente intolerable.

Les voy a tratar de contar brevemente que es lo que da origen al problema que estoy denunciando. La Hermandad de Jesús de los Milagros del Templo de San José, en Cuaresma y Semana Santa, organiza dos cortejos procesionales. Uno el primer jueves de Cuaresma y otro el Domingo de Ramos; que es uno de los cortejos más importantes de la actividad cuaresmal en la capital. Resulta que para ambas procesiones la Hermanad pone a la venta los turnos que en determinado momento se agotan por la amplia afluencia de cargadores. Razón por la cual con mucho tiempo de anticipación las personas empiezan a hacer largas colas frente al templo de San José en la Zona 1. Colas que prácticamente llegan a medir un par de cuadras de longitud. Aún no entiendo como teniendo la Hermandad acceso a otros medios de venta y distribución sigue con este arcaico sistema para vender sus turnos.

Habiendo puesto en antecedentes a ustedes que están brindándome su valioso tiempo en leer mis líneas continuo con la narrativa del problema. Estos cargadores desde hace varios años invaden literalmente la 5º. calle entre 12 y 13 avenidas de la zona 1, cual asentamiento. Ya que para que no les roben la cola y tengan acceso a un número montan chozas, casas de campaña, llevan sillas, alfombras, cartones y todo lo que esté a su alcance para apartar el famoso lugar. Lo penoso del asunto es que este montón de gente que por su puesto no son todos los cargadores, incurren en una serie de excesos que les voy a describir, tengo testigos de que lo que voy a comentar no es una exageración.

Los cargadores consumen tabaco y licor en la 5º. calle afuera del templo como si el lugar fuera un gran bar público. Por lo tanto, toda la quinta se vuelve un patio de vulgaridades, obscenidades y ofensas que no paran durante día y noche, el viernes mismo las malas palabras y los gritos se escuchaban incluso después de las 3 de la mañana.

No contentos con ocupar las banquetas de las direcciones que he comentado, cercano al viernes, sábado y domingo cierran la calle también con lazos y toneles y arman su CHAMUSCA desde la 7 pm hasta la madrugada, nada más y nada menos que en una de las calles más transitadas de la zona 1 que da acceso a zonas 6, 18, 5 y a muchos otros lugares. En dos oportunidades al querer pasar por enfrente de la chamusca no quisieron quitar los lazos y toneles, y al quitarlos con el carro reventando el lazo y moviendo los toneles la familia de mi esposa y yo hemos recibió una serie de insultos que más parecieran de un delincuente que de un cargador devoto de “Jesús de Los Milagros”.

Por la calle durante mañana y tarde transitan varios grupos de mujeres estudiantes que delante de nosotros han sido silbadas, insultadas y acorraladas con una serie de proposiciones indignas y que machacan la dignidad de cualquier mujer. Realmente la palabra es acosadas por nuestros cargadores.

Pero lo la gota que derramo el vaso fue el sábado 11 de febrero por la noche y en la mañana de hoy domingo 12, las personas que deseaban un turno realizaron disparos al aire para ahuyentar a un grupo de cargadores que se le estaba adelantando en la fila, se ofrecieron golpes. La calle estuvo a punto de volverse escenario de una batalla campal todo por buscar conseguir el tan ansiado turno para cargar en los hombros la imagen de Jesús. Hoy en la mañana al avanzar la cola, se puede observar de las peores miserias de este grupo, la calle está llena de vómitos, heces, orines, y cualquier cantidad de fluidos corporales un casi cuadra y media. Están a la vista de todos por si alguien incrédulo quisiera ir a observar.

Cierro estas líneas mencionando que quienes me conocen saben que soy católico practicante, voy a misa todos los domingos, pertenezco a grupos juveniles cristianos católicos, soy padre de dos niñas bautizadas católicas, sin embargo, les comento todo esto porque esta denuncia no es una cuestión de Fe. Esta denuncia es una cuestión de un ciudadano decepcionado de que en mi Guatemala los pocos desordenados opaquen las actividades maravillosas y piadosas de toda una Iglesia.

Y a ustedes Junta Directiva de la Hermandad les podría dar muchísimos argumentos bíblicos de que les han faltado pantalones para detener este desorden, sin embargo confío en que por el bien de su grupo, de su templo y sobre todo de tan histórico y bello cortejo procesional tomarán cartas en el asunto para detener estos excesos.

Atentamente

Mario García.
Cédula A1-1006315
Correro electrónico: marturh@gmail.com