promo 47

47 es uno de los números mas emblemáticos en mi vida, es uno de aquellos números que al escucharlo conecta inmediatamente a un sinfín de emociones y momentos en la memoria, y como no conectar de esa manera, si son 187 razones para ser importante, todos los amigos, socios, colegas y hermanos que el destino me dio como compañeros de promoción, todos aquellos a quienes conocí bajo las paredes de las aulas de mi amado Colegio Salesiano Don Bosco, y aun son más las razones, tengo que sumar también a todos aquellos que sin graduarse en el colegio formaron parte de mi amada promoción, como nuestros buenos amigos el Aquino, El Acevedo, El Yuca, El Tico, Robertio (el chiqui), El Chacón, el Basir (asi se escribía???) y todos aquellos que en algún momento compartieron aulas con los que tuvimos el privilegio de graduarnos bajo el amparo de la educación salesiana el 26 de octubre de 1996.

Precisamente el año pasado se cumplieron 15 años de nuestra graduación, y paradójicamente por múltiples razones no pudimos tener una misa, ni siquiera una reunión informal para celebrar nuestras bodas de CRISTAL de graduandos, sin embargo creo que todo tenía un porqué, y es que del año pasado para acá hemos atravesado un sinfín de emociones que de cierta manera han permitido que nos hayamos mantenido en contacto, incluyendo alguna de las visita de nuestros hermanos que han hecho vida fuera de nuestras fronteras y a quienes aprovecho para mandar un fuerte abrazo. Al final Quizás alguno dirá que el contacto fue un poco menos en persona y muchas veces más a través de la redes sociales, sin embargo ha servido para mantenernos actualizados de la vida de muchos que hacía mucho tiempo habíamos dejado de frecuentar, el contacto personal en algunas ocaciones llego de la mano del bendito futbol aprovechando nuestras habilidades a través de alguna emocionante chamusca, tambien pudimos juntarnos en alguna reunión social provocada por la convocatoria en las redes sociales y hasta en momentos de profundo dolor como en la partida terrenal de nuestro recordado Pashte Luna a quien mando un abrazo hasta el cielo, estoy seguro que Sergio ha actualizado en noticias a Berreondo y a Molina a cerca de todas las aventuras que hemos podido vivir desde su partida, asimismo estoy completamente convencido que los tres fueron en su momento bien recibidos por una buena canción de guitarra entonada por el mejor de los maestros de la promo, nuestro amado Saúl. En fin como nos hemos podido dar cuenta estos últimos meses han sido de mucha emoción en el seno de la XLVII Promoción.

Y particularmente hoy al escribir estas líneas acerca de todos estos momentos mi corazón no puede dejar de sentir una profunda emoción al recordar algunos de estos instantes de los últimos meses que permanecerán en nuestro recuerdo por mucho tiempo, como las fotos tomadas en horas de las madrugadas en el tercer tiempo luego de las chamuscas en las canchas del pin o las fotos de antaño grupales que alguno subió a fb, y de momentos mas intensos que me sacaron las lagrimas como cuando entonamos el himno salesiano en el funeral de Luna y el abrazo de agradecimiento del papa y el hermano de aquel diciéndonos que lo valioso de nuestra presencia. Sin embargo todos esos momentos eran el preámbulo para lo que iba a venir, y de donde desprendo el titulo para estas líneas, Julio 2012 ha sido el mes en el que finalmente gracias a la iniciativa de dos valientes compañeros hemos dejado la apatía y a mi juicio hemos aceptado el reto de meter a nuestra promoción al fuego, al fuego que en definitiva hemos decidió afrontar para el rescate personal, espiritual y material de una de las ovejas del rebaño de la XLVII Promoción.

Y es así como el primer fin de semana de Julio, El chino nos ha dado a todos la oportunidad de vencer nuestra indiferencia y nuestra comodidad y embarcarnos como promoción a una tarea por demás desafiante, El rescate de uno de los miembros de la promoción que había caído en el infortunio y en la adversidad de una vida de abandono. Este mes hemos emprendido todos juntos sin discusión la tarea de unir nuestras manos y tender un puente a la existencia de nuestro recordado Gorch. Este mes Carlos Enrique ha sido rescatado de las calles y hemos empezado a brindarle un poco de solidaridad, estos últimos días hemos vencido nuestra indolencia y nos hemos unido en torno a la iniciativa de Pablo y del Chino para definitiva aumentar la calidad de vida al brillante Carlos Enrique Álvarez Hernández.

Para quien aun no conoce los antecedentes de la historia, hasta la última semana de Junio, Carlos Enrique vivía en las calles de la ciudad, en la intemperie, esto luego de la secuela que le ha dejado el consumo desmedido de Alcohol y drogas durante años,ya durante algunos meses Pablo y David habían iniciado ya la tarea llevándole un poco de recursos para que pudiera comer algo, y en alguna oportunidad visitándolo para platicar con él, sin embargo el domingo 9 de Julio, Pablo, David, el Negro de la Roca con la ayuda de algunos otros de la promo, han llevado al Gorch de las calles del trébol hacia un centro de desintoxicación y recuperación, debido a esto, desde ya hace tres semanas Carlos Enrique ha tenido un lugar donde pernoctar, un techo que lo proteja de las inclemencias del frio, además de una alimentación segura, y desde hace semanas allí en el Centro ha recibido la visita de varios de nosotros sus compañeros de promoción, que han llegado a platicarle y a brindare un poco de afecto. Durante los últimos dos miércoles he tenido también el placer de visitarlo junto con el Chino y a David, es por eso que escribo estas líneas para compartirles la experiencia tan grata que tenido de darme cuenta como el Gorch ha recibido el apoyo de sus compañeros de colegio y a raiz de esto a mejorado sustancialmente su calidad de vida, son simplemente indescriptibles todos estos momentos que hemos vivido a raíz de este hecho, como les decía al principio Dios nos ha brindado la oportunidad de forjarnos en el fuego y lo mas importante es el hecho que a este desafio le faltan varios capitulos más, asi que redoblar fuerzas y emprender esa lucha que lleve a Carlitos a sonreir plenamente y a darnos la oportunidad de darnos un fuerte abrazo como compañeros de promoción.



Mario Arturo